De manera especial celebra el Domingo de Pascua la Iglesia Católica

  • Medios de comunicación, TV, radio y plataformas digitales desarrollaron su función para fortalecer los lazos de espiritualidad entre creyentes.

     

    Irineo Pérez Melo.- De una manera especial, por la emergencia sanitaria por el COVID 19, la Iglesia Católica celebra el Domingo de Pascua en el presente año, en la cual los medios de comunicación, la televisión, la radio y las plataformas digitales  “han desarrollado una función verdaderamente bella. Han servido para fortalecer los lazos espirituales entre los creyentes”.

    Lo anterior se desprende del comunicado dominical emitido por la Oficina de Comunicación Social del Arzobispado de Xalapa, signado por el presbítero José Manuel Suazo Reyes, en donde resalta que “la creatividad pastoral no ha faltado, Jesús sacramentado ha salido a las calles a bendecir los hogares”.

    En el documento destaca que las imágenes sagradas han inundado las redes. A través de las plataformas digitales se transmiten catequesis, retiros, reflexiones, celebraciones, rosarios, videos, films y documentales.

    Ante la contingencia, la Iglesia ha estado acompañando a sus feligreses, como madre amorosa y diligente se ha tenido que reorganizar para seguir ofreciendo a sus hijos el alimento de la fe. La simbología y la sacramentalidad se han convertido en un canal de gracia.

    En estos días, los templos católicos siguen abiertos para que nuestros feligreses sigan contando con un espacio sagrado para sus encuentros con Dios a través de la Palabra y la oración, las celebraciones litúrgicas se realizan en forma privada, los sacerdotes ofrecen día a día el sacrificio sagrado que conmemora el sacrificio de la cruz y con ello se distribuyen las múltiples gracias para todos.

    Se recuerda que este primer domingo de pascua América Latina será consagrada a la Virgen de Guadalupe, la emperatriz de América. Se trata de un acto de amor y de confianza en ella de pueblos hermanos que cuando están afligidos platican con ella sus penas.

    Esta consagración es para suplicar a María de Guadalupe que interceda por nosotros ante su hijo Jesús para que nos libre pronto de la pandemia del COVID-19. Encomendaremos nuestra vida a su cuidado maternal.

    En otra parte del comunicado, destaca que “hemos celebrado la Semana Santa, la semana más importante del calendario litúrgico en la Iglesia Católica. Ahora nos encontramos en la Cincuentena Pascual, 50 días que prolongan el anuncio de la resurrección: verdaderamente ha resucitado y vive entre nosotros.

    Con la celebración de la pascua ha llegado el gozo y el júbilo, en medio de esta contingencia sanitaria. Las campanas de las catedrales y de todas las Iglesias del mundo han tañido con insistencia para cantar nuevamente Gloria a Dios en las alturas y en la tierra paz a los hombres de buena voluntad porque Cristo vive y está en medio de nosotros.